La comunidad en la parroquia Manuel Dagnino llevaba 15 años sin gozar del servicio de gas doméstico eficiente.
Maracaibo, 13 de mayo de 2024.- 15 años llevaban los vecinos del sector La Sonrisa, parroquia Manuel Dagnino, sin gozar del suministro de gas doméstico, una problemática que fue superada gracias a la reciente intervención a las redes de la zona por parte de la Alcaldía de Maracaibo a través del Servicio Autónomo para el suministro de Gas e Infraestructura (Sagas).
El mantenimiento correctivo realizado por este organismo, además de la sustitución de dos tomas inadecuadas que habían causado estragos en la red, permitió que 34 hogares de este sector del sur de la ciudad, entre la avenida 19E con calle 106, cuenten con el suministro estable de gas doméstico.
La solución a esta realidad, durante apenas un día de trabajos, permitió a los habitantes de la zona superar más de una década de dificultades para cocinar sus alimentos, tiempo en el que se habían visto obligados a utilizar cocinas eléctricas, bombonas y hasta leña, con todo el perjuicio que esto último puede significar para la salud.
Soraima Nava, vecina del sector, relata este calvario. “Mi bombona de 10 litros cuesta 6 dólares y me duraba como dos meses, teníamos que estar reuniendo de poco en poco para cuando se acabara la bombona tener con qué comprarla y a veces esperar hasta un mes para que la llenaran porque no siempre hay gas”, explicó.
A esto añade la dificultad de cocinar con bombona. “Se tardan muchos los alimentos. Si uno hace granos entonces se va todo el gas y siempre quedan duros. Para poder hacerle el almuerzo a mi esposo y que se lo llevara al trabajo, tenía que cocinarlo en la noche. Y para mis hijos tenía que empezar a cocinar desde la hora que saliera mi esposo para que estuviese a mediodía”.
La otra cara de la solución llevada a cabo por el Sagas, es el alivio económico que supone para los vecinos.
“La bombona de 18 litros, como la que yo tengo, empezó valiendo 5 dólares, ya va por 10, y ese es un gasto considerable”, narra Alfonso Montenegro, vecino de La Sonrisa desde hace 24 años, quien continuó diciendo: “Ahora no solo nos ahorramos un dinerito, sino que tendremos un servicio constante y eficiente que podremos cancelar a un costo mucho menor”, dijo en referencia al pago del servicio municipal. En solo cuestión de un día, el Sagas solventó una problemática de varios años, demostrando una vez más la eficiencia que ha caracterizado su accionar durante la gestión del alcalde Rafael Ramírez Colina.
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