La rehabilitación integral de la subestación de gas permitió corregir escapes en la infraestructura y contempló la limpieza y desmalezamiento. El mismo trabajo se realizará en las otras 27 subestaciones de gas que existen en la ciudad.
La entrega de la subestación de gas de San Jacinto completamente rehabilitada, por parte de la Alcaldía de Maracaibo, a través del Servicio Autónomo de Gas (SAGAS), el pasado 10 de mayo, generó una reacción positiva en los vecinos de esta urbanización.
Los ciudadanos dieron a conocer cómo cambió el servicio tras los trabajos que se realizaron con el propósito de sacar del abandono en el que estuvo sumergida la subestación durante 23 años.
Roxana Flores, ama de casa y residente del sector 5, señaló que en este espacio no había ni señalización que indicara que allí funcionaba una subestación.
“Este punto estaba lleno de mucha maleza, las paredes estaban deterioradas y no había ningún tipo de señalización, ahora cuenta con identificación y una rehabilitación total para que la gente cuide y sepa que allí pasa el gas”, precisó la mujer.
Alegaron que la intervención realizada por el organismo municipal permitió, además, cambiar la cara al sector 5 de la urbanización y esto es otro de los puntos a destacar por quienes frecuentan la zona.
“Esta estación estaba en penumbras y sin ningún tipo de iluminación, pero vino la Alcaldía de Maracaibo y colocó unas lámparas que prenden a las 6 de la tarde y se apagan a las 6 de la mañana, es muy bueno que este espacio sea iluminado”, celebró Ángel Palacios.
A juicio de los residentes de San Jacinto, desde que la Alcaldía entregó rehabilitados los espacios «mejoró significativamente el suministro de gas en el sector».
“Vi que corrigieron una fuga de gas que tenía esta estación y con ese trabajo mejoró el servicio en el sector, además de solventar el peligro que representaba tener ese escape en la calle, no se fuera a prender fuego. Ya hoy podemos decir que está reparado y sin ningún peligro que represente para los ciudadanos que aquí vivimos”, destacó Juan Soto, comerciante de San Jacinto.
Con los trabajos realizados en la subestación de gas se beneficiaron 75 mil habitantes de las parroquias Juana de Ávila y Coquivacoa, además, este es el inicio del mantenimiento que se hará a otras 27 subestaciones.
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